Con el tiempo, la informática avanza a pasos agigantados, y se crean aplicaciones y juegos que requieren más recursos, mejores procesadores y placas de video, mas memoria RAM, etc...
Además, el ordenador poco a poco se va deteriorando, empiezan a aparecer fallos en el hardware y se acumula polvo en el interior, que ocasiona daños al microprocesador y demás partes sensibles. Por eso ofrecemos soluciones a su medida.